Cuando pienso mi futuro
y te imagino conmigo,
huele el aire a pan tostado,
caliente, para el domingo.
Frío afuera y de las nubes
lluevo gotas de mi mismo.
Cuando esperas menos pasa
eso que vienes buscando,
tu alma lo representa
apenas como una traza.
Como en gotas de silencio
lluevo mi alma por la casa.
Sedienta de mis palabras
cosas me pasan contigo,
y te lluevo en mil vocablos.
Elixir de mi te moja...
sientes torrentes en ti,
tu piel de mi se sonroja...
Por tenerte en mí ahora
en líquido desenfreno,
por lloverte desde el cielo
me tiraría a un abismo;
total que fuera en el mismo,
el que tu habitas sola...
No pidas que me cerciore
de si hago lo correcto.
El alma que me enamora
secará bien mis defectos,
de esta inepta lluvia pobre
habrás de ver lo concreto.
La vida perdí en amores
¡No entendieron mi secreto!
Como esta noche lluviosa,
de un frío y pálido cierzo,
me precipito en tu Ser . . .
¡Haz de exito este intento!
- Vente ya y sin paraguas
¡Te lloveré sin aliento! -
Daniel Palavecino
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